Entender la bioenergética como una terapia es reducirla sólo a uno de sus aspectos más conocidos. En realidad, la bioenergética es una corriente de una energía particular, la energía de vida (prana, qi, orgón, llámese como se quiera), que llena y recorre cada rincón del universo, no dejando nada vacío. En el despliegue natural de su naturaleza está crear los planetas, las estrellas y las galaxias. Una forma particular del desarrollo de esa energía es toda manifestación de vida biológica, desde un simple organismo unicelular a la complejidad de la vida humana. Bioenergética es el despliegue de esa corriente de energía de vida, y por extensión, para nosotros, el conocimiento, el cuidado y el reaprender a sumergirnos en esa corriente de vida, de la que social e históricamente nos hemos desconectado.
